martes, 13 de noviembre de 2007

"El nacimiento de la Constitucion por Ramón Oviedo"
CULTURARTE
El maestro Ramón Oviedo siempre ha sido constitucionalista. Lo vió el pueblo dominicano en los murales de arte comprometido con la causa constitucionalista durante la revuelta civil de 1965, cuando los muros de Ciudad Nueva fueron su escuela y taller de arte - denuncia. Su academia fue la vida durante los convulsos meses de la segunda ocupación militar norteamericana a nuestro suelo, no para cobrarse la deuda de la Convención Domínico Americana de 1907, mediante la apropiación de la Receptoria de Aduanas, sino para librarnos del fantasma del Comunismo que nos acechaba y amenazaba con hacer otra Cuba en el Caribe.
Ahí comenzó la andadura creativa de Ramón Oviedo, nacido en Barahona en 1924 y que con ochenta y tantos años a cuestas es acaso el más joven de nuestros artistas plásticos. Se embarca en sus creaciones y acomete el lienzo como un niño que acaba de recibir un juguete nuevo. Aunque en mis recorridos policiaco culturales por Barahona no he hallado un sólo rastro suyo, ni siquiera un mural, una plaza que lo festeje en vida, un busto, una placa conmemorativa ni nada. En Barahona no conocen a Oviedo y como no lo conocen no lo pueden valorar.
Ramón Ferreras en su obra "Guerra Patria" hija de un cronista de la Guerra de Abril de 1965, quien vivió los acontecimientos, relata que "Para ese tiempo, mayo de 1965, los grupos de pintores mas renombrados entre los jóvenes se dedican a pintar afiches que llenaban totalmente las paredes de algunas esquinas y vitrinas en El Conde".
Y Danilo de los Santos en su obra "La Pintura en la Sociedad Dominicana" dice que "fue al Frente Cultural a quien le correspondió, como entidad que agrupaba a los jóvenes intelectuales del 60, programar todas las actividades educativas, artísticas, y de entrenamiento que necesitaron los constitucionalistas para mantener en alto la moral de guerra circunscrita entre los límites urbanos de las mas antigua capital americana. Desde el inicio de la insurrección revolucionaria, el nutrido grupo de artistas que celebró la exposición de noviembre en el Palacio de Bellas Artes estuvo lleno en el activismo que le correspondió en medio de la lucha armada. Concluye la cita.
Oviedo, citado por Manuel Valdeperes en 1966, dice de su obra: Los primeros signos gráficos que imprimí en alguna superficie tienen en mi mente un recuerdo desagradable. Siempre los asocio al hambre que me rodeó durante toda mi infancia y gran parte de mi adolescencia", termina la cita .Y es que Oviedo es un pintor social, lo social en su obra no es asunto de poses ni de coincidencias históricas, sino un haber existencial, un compromiso con la humana condicion y las luchas del hombre por mejorar al mundo.
Efraín Castillo en el Catálogo de la Exposición del Grupo Proyecta Uno, en donde Oviedo participara fuera de catalogo con algunos retratos y autorretratos dice del maestro que "Oviedo no es un creador nato. Es un magnífico reproductor de su pueblo "
En Oviedo trasciende, por encima de los considerado puramente "Oviedano" y que constituye su marca personal o su sello creativo, toda una imaginería fantástica. Oviedo no se queda preso de la Revolución, compromete su arte en el compromiso que le marca el tiempo, pero de ahí, superada la crisis, no mas. Basta ya, ahora es preciso y necesario emprender otros caminos sin dejar de lado el compromiso, sin desprenderse de lo humano y del drama del hombre, no lo hirió solamente el proceso de abril, le han herido todos los otros procesos y han marcado su obra, sin quedarse preso en el panfleto que denuncia, en Oviedo su marca mas distintiva ha sido siempre el cambio, el reinventarse, la combinación de lo clásico, penetrado del tiempo y hacerlo copular con las vanguardias. Por eso su obra puede ser clasificada por procesos claramente identificables. Asistir a una nueva muestra de Ramón Oviedo es ir a ver algo nuevo, un nuevo paso, un nuevo espacio de su filón creativo, es ir a latir junto al humilde maestro la alegría de una nueva primavera recién inventada, es contemplar una nueva floración vital.
En una obra de Ramón Oviedo está presente un discurso o varios discursos a la vez. Todas tienen algo que decir y lo dicen a veces en un susurro o a veces con un grito de dolor como en "Mamamérica", donde coloca, por encima de las variedades raciales y las diferencias históricas y culturales, a todos lo pueblos de nuestra América como hijos del mismo vientre, de una madre común, que grita por sus hijos. En una obra de Oviedo el todo se expresa. Cada figura, cada rasgo retorcido y expresionista dice algo, hasta los espacios en blanco y el fondo de la obra tienen algo que decir.
Habíamos dicho antes en alguna parte y junto a Alnurfo Soto, que Oviedo es el pintor de la Revolución y como testigo del proceso nos muestra una obra extraída del dolor de los momentos mismos de la guerra. En su lienzo "24 de Abril" que es una especie de Guernica criolla, Oviedo describe el dolor y la opresión del drama dantesco que vivía la nación dominicana pisoteada por las botas opresoras norteamericanas. De él dice Arnulfo Soto, (1970): Oviedo consigue en su cuadro "24 de Abril", sin lugar a dudas, su mejor realización pictórica, es el cuadro mas importante que ha creado un autor dominicano, por su magnífica concepción, por la acertada utilización de los elementos, por el gran trabajo artesanal, por la formidable concepción compositiva, por el consecuente mensaje popular y por su gran contenido ideológico."
Ya en los años siguientes al conflicto de abril, Oviedo evoluciona hacia una pintura mas madura, se va develando el maestro que hay en el. Ese año gana el primer premio de Pintura en el Concurso anual de E. León Jimenes con su obra "Espantajo", denotando, al decir de Danilo de los Santos,"un cambio sustancial en la técnica como en el empleo de colores mas vivos y variados, que si bien añaden riqueza cromática a sus pinturas, en cierta forma restan dimensión sicológica a los tipos".
Mas adelante, y a partir del laureado "Levántate Lázaro", premiado también al año siguiente en el concurso de Santiago, Oviedo puso a deambular su obra bajo el influjo de Picasso, en un apego no total como lo demuestran otros trabajos donde inclusive se da cierto lirismo y hasta cierta rítmica nativista en su adentrada pintura social. De éi dice Marianne de Tolentino que en "Vendo Hojas de Baño" Oviedo canta un himno visual al esfuerzo y al trabajo de los humildes , expresando a la vez un reconocimiento, una poesía directa a la penosa realidad del caminar y del cargar perennemente "
En el salón de entrada de la Cámara de Diputados de la República será develado el mural del Maestro Ramón Oviedo titulado "El Nacimiento de la Constitucion". Fue ejecutado sin prisas, sin espantos por el tronar de carabinas, sin el riesgo de morir fusilado en el intento. Es una obra que muestra la madura juventud del maestro, un resonar de cañones y estertores de su alma de constitucionalista. Oviedo parió allí su visión personal de la Constitucion dominicana y la entrega a la posteridad en esos muros. Un nuevo encuentro con su credo personal artístico y político. Los muros de Ciudad Nueva son sustituidos por los muros del Congreso, el ruido de los disparos de ambos bandos en la guerra patria es sustituido por los aplausos de la nación dominicana entera saludando la obra del Maestro Ramón Oviedo.
GUERRA BACTERIOLOGICA: LOS SOLDADOS DE PROBETA
HISTORIOFAGIA
Uno de los peligros que acechan al mundo actual es no solo el empleo de armas de guerra convencionales, portaaviones, misiles, tanques, proyectiles, sino el empleo con fines de armas de destrucción masiva de virus de enfermedades y bacterias letales, dejados en libertad o esparcidos sobre ciudades enteras, que tendría un efecto mortífero en miles o millones de personas según la cantidad de arma biológica utilizada.
Esas armas, o más bien esos virus y esporas, pueden ser desarrollados en laboratorios a un costo muy bajo, transportados por suicidas a quienes no les importa morir en la operación y esparcidos en los cielos de las ciudades o edificaciones que sean objetivo de los ataques terroristas. La advertencia no seria posible porque los agentes biológicos estarían en el aire tomándose su tiempo para incubarse en el organismo y hacer su efecto mortífero, comenzaría a llenarse las salas de urgencias de los enfermos con los primeros síntomas, se dudaría en diagnosticar porque, el ántrax, por ejemplo da iguales síntomas que la gripe o influenza. Ante el número alarmante de casos se comenzará, tímidamente, manejado por burócratas que no quieren alarmar a la población y afectar sus actividades normales dando alarmas que puedan resultar falsas y dañar seriamente la economía, a dar alerta general ante un posible ataque bacteriológico.
Las grandes metrópolis se convertirían en un verdadero caos apocalíptico, la gente correría de un lado a otro y se exacerbaría el sentido de terror a enfermarse, esa fobia que es, mas común de lo que se piensa. Los ciudadanos tendrían poco que hacer, no todos tienen máscaras, no hay máscaras para todos y no se puede vivir sin máscara, pero tampoco se puede vivir con ella las veinticuatro horas .Las máscaras que vemos en todas las demostraciones de expertos en desastre así como los trajes y los guantes, no traen tamaño para niños, parece que solo quieren sobrevivientes adultos.
Las ciudades se convertirían en zonas de guerra con un enemigo invisible que no matan las balas ni los misiles. Faltaría solidaridad de la gente para correr el riesgo de contaminación por contacto o inhalación de esporas o virus. Verían morir a sus parientes, amigos y vecinos sin prestarles ayuda, la profesión de médico paramédico o socorrista estaría a prueba ante el reto gigantesco de socorrer los ciudadanos infectados .Las ciudades atacadas se convertirían rápidamente en un hospital y posteriormente en un gran cementerio. Dante globalizado.
EL USO DE ARMAS QUIMICAS
Los atentados del 11 de septiembre de 2001 en el World Trade Center de Nueva York y el Pentágono, demostraron al mundo y a las propias agencias de seguridad nacional que tan vulnerables eran los Estados Unidos ante el terrorismo enquistado en sus propias entrañas. Ante todo fallo se impone revisar el sistema. Esa revisión, probó desde antes del informe final de la comisión que investigó los atentados, que las agencias de investigación y seguridad nacional sabían que habría un ataque, incluso se tenia grabación de conversaciones telefónicas de terroristas mencionando algo peor que Hiroshima y Nagasaki, pero en Nueva York. Lo que probó la efectividad de esos atentados que cobraron mas de tres mil víctimas de setenta y ocho nacionalidades, es que las agencias de seguridad no compartieron información de inteligencia que seria valiosa sino para prevenir para retardar o impedir por un tiempo, que se realizara tan exitosamente una catástrofe como esa a tan bajo costo para los terroristas y con un daño humano y económico como el que produjo, esto aparte del impacto psicológico a escala mundial.
Pero los investigadores del 911 no descartaron la presencia combinada en esos atentados, de armas químicas, por lo que antes del mediodía, luego del desplome de las torres, fueron enviados a la hoy zona cero, veintidós expertos en investigación bacteriológica de la Guardia Nacional de Nueva York llegaron desde su sede en Scotia, N.Y. para tratar de detectar la presencia de virus o esporas letales de ántrax, botulismo , agente VX o cualquier otra amenaza de laboratorio que haya sido esparcida en los alrededores. El Metro de la ciudad estaba en alerta máxima, se interrumpió el servicio, así como se detuvo la aviación comercial, doméstica, turística o de cualquier tipo así como el movimiento de barcos de carga, cruceros o botes privados en el muelle, mientras que los aeropuertos eran zona de caos general, mientras que las salas de urgencia de los hospitales de Manhattan no daban abasto con la demanda de urgencias no solo de heridos sino de personas de cualquier edad en estado de shock que habían sido evacuados de los edificios vecinos.
Con el empleo de armas biológicas en los ataques del nueve once el impacto no terminaría con el desplome de las torres, sino que seria mucho más duradero y demoledor, porque las esporas del material o los materiales empleados, en caso de haberse usado, cosa que no se descarta todavía, seguirían en el ambiente como un asesino invisible.
Esa posibilidad fue sostenida por los investigadores junto a los valientes bomberos de la ciudad que no estaban protegidos con equipo antibacterial al inicio de las operaciones de rescate y salvamento, por el hecho de que entre 1990 y 1997, el número de investigaciones criminales en los Estados Unidos que involucraban armas bacteriológicas, se duplicó.
En 1997, 22 de los 74 casos investigados, es decir, un 30 por ciento tuvieron agentes bacteriológicos involucrados y en 1998, 112 de 181 investigaciones de casos criminales, un 62 por ciento, involucraron materiales bacteriológicos.
Los más factibles de ser afectados con un ataque de agentes bacteriológicos seria la población y los animales. Dada la circunstancia de que los materiales y bases para desarrollar y cultivar armas biológicas son de bajo costo y se desarrollan legalmente por laboratorios de biomedicina que desarrollan medicamentos y vacunas contra esa mismas enfermedades u otro tipo de enfermedades. En 1996, en Ohio un hombre fue hallado culpable de comprar esporas de peste bubónica por correo con fines de contaminar la ciudad.
Los agentes biológicos pueden ser esparcidos lanzándolos al aire, se pueden contaminar también por contacto directo por heridas abiertas, rasguños, agua contaminada, alimentos u otros medios. Se han realizado varios ejercicios de simulacro en instalaciones publicas y privadas de los Estados Unidos, incluso después del 911, que demostraron que esa gran nación no esta preparada todavía para soportar o manejar la crisis que desataría un ataque bacteriológico masivo, tomando en cuenta lo difícil que seria prevenir la contaminación evitando contacto o inhalación, recibir y atender miles o cientos de miles de urgencias medicas de repente o de manera creciente y evacuar los ciudadanos adecuadamente con el riesgo de que sean propagadores o agentes multiplicadores del o de los agentes letales en los lugares donde sean llevados , esto , junto al efecto psicológico de paranoia y pánico colectivo que podría generar un ataque con virus letales.
Según el Centro de Prevención y Control de Enfermedades, Center for Disease Control And Prevention, CDC, por sus siglas en Ingles, los agentes biológicos constituyen un grave riesgo para la seguridad nacional estadunidense por tener un alto impacto en los sistemas de salud de la población, por lo que se impone un mayor destino de fondos para personal, equipo y tecnología para cada ciudadano así como la información necesaria y oportuna para sobrevivir a un posible ataque masivo.